Nuestro Primer Post

25 octubre, 2013

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¡Buenos días!

¡Qué ganas teníamos en Intalentia de estrenar un nuevo Blog!

Desde este nuevo espacio queremos hablaros y aconsejaros sobre empleo, recursos humanos… ¡y sobre mucho más!

También queremos usar este espacio  para reflexionar y debatir temas de actualidad, ocio y para que compartáis con nosotros contenidos que queráis que disfruten nuestros lectores.

Por supuesto, lo principal es que todos los que leéis nuestros contenidos aprendáis algo con cada Post, o que paséis un rato agradable, por eso, dejamos abiertas las sugerencias y colaboraciones a todos los que nos seguís.

Un saludo para todos y esperamos que disfrutéis con nuestro primer Post, de un seguidor de Intalentia que nos ha enviado una carta con un toque  de humor, para aligeraros el duro trabajo que es buscar empleo.

Si queréis colaborar aportando contenido interesante podéis escribirnos a comunicación@intalentia.com

¡Feliz fin de semana, y que disfrutéis la carta de nuestro seguidor!

 

“Carajo, esta sí que es buena, toda la vida criticando a aquellos que se hacen los listillos, los que quieren destacar haciéndose los normales, aireando sus adentros, y aquí estoy yo, lector de poesía, de tardonovelas y mitómano de frases cortas (“no la toques ya más, que así es la rosa…”), escribiendo lo primero que se me pasa por el caletre y enviando un chorro de estupideces recién salidas del horno, que se van al papel sin pasar por la casilla de salida.

Pero así se escribe ahora, frases cortas y ritmo vivo, (que diría la profesora de baile de Fama el día que le tocó dar clase literatura a una panda de pretendidos (o reales) arquetipos de la sociedad del imperio). O sea que después de aprender lo que son las anáforas, las aliteraciones y los pleonasmos, después de llegar a gozar con los encabalgamientos de la poesía de Lope y tratar, sin éxito, de imitarlos, me encuentro rodeado de gossip, it girl, trending Topic, y otros ramalamalamadingdongs.

Pues sí, queridos, quien me iba a decir, que acabaría tomando gintonic  usando el teléfono móvil, en lugar del telefonillo, para decir que bajen al portal, y sustituyendo un “te quiero” susurrado al oído por un T.Q.M mandado por wasup. Si hasta tengo un hermano que me felicita por mi cumpleaños con un SMS….

Ay el gintonic, esa bebida de viejos alcoholicos de fin de semana a los que ya les sienta mal la coca-cola, o de jóvenes a los que no les gusta el alcohol y puestos a ello, se piden la copa más de moda y con nombre propio.

Me pone un gintonic?

De que lo quiere?

Pues de ginebra y tónica, Einstein, de que va a ser?

No, caballero, me refería a que de qué ginebra?

Jode, ¿donde hemos llegado?, A estos ingleses, inventores de la ginebra, que nos aventajan en tradición alcoholica, si les pides un gintonic te lo ponen de Gordons, y sanseacabó,  pero si les pides una birra… ay, si les pides una birra te enseñan la barra del pub, repleta de tiradores de cerveza y te dicen que elijas una, que es como si a un adolescente le dejas entrar en los vestuarios de las modelos de la pasarela Cibeles y les dices que pueden probar la que quieran. Escalofríos me dan solo de pensarlo, lo de las birras digo. (Por cierto, ¿Cuántas cervezas tuvo que beberse el pichón que decidió cómo se iba a puntuar un partido de tenis?, ¿por qué 15, 30 y 40? (Yo entiendo que un inglés no puede tantear 1, 2 y 3, pero puestos a hacerlo de 15 en 15, que me expliquen lo del 15, 30, 40.  o es que tenía miedo a que si decía 45 le hicieran la rima consonante y ofensiva.?))

Y estas cosas me pasan con frecuencia, -ayer soñé que estaba soñando y cuando me desperté me tuve que volver a despertar,  me gustan tanto los paréntesis que hay veces que meto unos dentro de otros y los tengo que cerrar dos veces seguidas en la misma frase. ¿es grave  doctor?

Sigamos con los ingleses, unos tíos que inventan el futbol, el tenis (de eso ya hemos hablado) el rugby (un deporte que consiste en ir para adelante pero que solo se puede pasar hacia atrás), el gintonic (¿de que lo quiere caballero?) y que tienen a Dickens (y nosotros a Galdós), a Wilde (y nosotros a Lope), a Ágata Christy (y nosotros a Corin Tellado) a Conan Doyle (que no, tonto, que este es escocés), y a quien más… se me olvida alguno, a sí, Don Guillermo, grande, muy grande, el más grande (pero nosotros tenemos a Don Miguel, que además lo hacía con una sola mano).

Pues que se queden con su flema, sus dardos, su 007, su Beni Hill y que nos devuelvan Gibraltar.

Ya ves, del coro al caño hemos llegado al peñón.

Me voy a tomar una birra.

Saludos cordiales.”

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