Cada día se automatizan más empleos y por desgracia muchos jóvenes según los datos publicados por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) eligen carreras que tienen riesgo de desaparecer.
¿Qué pueden hacer los institutos y sus orientadores?
Según este estudio está claro que los jóvenes necesitan participar más en actividades de desarrollo profesional.
Pueden realizar:
- Prácticas.
- Visitas a empresas para ver diferentes puestos de trabajo.
- Participar en foros o ferias de empleo.
- Realizar una mesa redonda con antiguos alumnos para que hablen de su propia experiencia tanto en centros de formación profesional y universitarios como los que ya se encuentran trabajando.
Estas actividades son muy importantes para que los jóvenes interactúen y amplíen información que les ayuden en sus decisiones.
Además, cada día surgen nuevas carreras y los orientadores deben estar informados para así transmitir y guiar mejor a los alumnos.
Como todos los nuevos puestos tienen una parte relacionada con el mundo tecnológico, algunos de los nuevos estudios universitarios que han aparecido son:
- Bioinformática.
- Bioingeniería.
- Gestión de ciudades inteligentes y sostenibles.
- Diseño y tecnologías creativas.
- Tecnologías interactivas.
- Ingeniería en electrónica, robótica y mecatrónica.
- Ciencias de Datos
