¿ A quién no le ha pasado ¿ ¿Quién no ha vivido la siguiente situación? ¿ quién no ha protestado por algo que cree injusto y no se le ha hecho caso?
Pensareis que por qué os hago estas preguntas, pues os lo diré, ya que siento que cuando algo es injusto por pequeño que sea se debe comentar y que alguien le conteste aunque sea para decirle: – “Me importa un pepino”.
En un banco, de cuyo nombre no quiero acordarme, tengo mi cuenta, cumplo todos los requisitos que ellos me han marcado para no cobrarme comisión, y aun así cada vez que realizo una transferencia o algo, les da lo mismo y me cobran la comisión, reclamo por email para que me la devuelvan y no me hacen ni caso, ni me contestan ni me la devuelven, con esto consiguen que yo cancele la cuenta, cosa que no creo que les agobie porque lo que menos tengo son millones. Pero no creo que la solución sea sólo cancelar la cuenta, creo que debo conseguir una respuesta educada a mis 5 emails, creo que todos somos personas y necesitamos una respuesta cada vez que realizamos una pregunta.
Muchas veces mandas correos pidiendo información de algo, tanto en la universidad como en muchos organismos y te ignoran. Pero qué más nos da contestar a la gente que necesita una simple explicación nuestra, un simple gracias…. Es nuestra manía muchas veces de ser bordes, porque sí. Creo que a todos nos iría mucho mejor si siempre nos pusiéramos en el pellejo del contrario, si jamás hiciéramos al otro lo que no nos gustaría que nos hicieran a nosotros mismos.
Pongamos nuestro granito de arena en ser cordiales con los demás, dar un poco de cariño no nos cuesta dinero, hagámoslo. Dejemos de ser gente fría, no se está más ocupado ni se es el super ejecutivo por no contestar a sencillos correos, todos tenemos 30 segundos para poner una simple frase, que haga que el otro se sienta importante, ya que creo que todos somos importantes, no iremos por la calle firmando autógrafos pero en nuestro pequeño mundo somos alguien.
Cuidemos los detalles y así creceremos no sólo profesionalmente si no también como personas.
